Un hombre ha sido acusado de torturar, golpear, asfixiar y degollar a su amigo de la infancia durante un aterrador ataque que se prolongó por más de seis horas en East Quogue, Long Island, Nueva York. Jeremy Allen, de 43 años, fue arrestado y acusado formalmente de asesinato y manipulación de evidencia física tras la muerte de su amigo Christopher Hahn, también de 43 años. Durante su comparecencia ante el juez de la Corte Suprema, Timothy P. Mazzei, Allen se declaró “no culpable” y se le ordenó permanecer bajo custodia sin derecho a fianza.
La fiscalía ha presentado pruebas que detallan un ataque brutal en el que Allen golpeó a Hahn con un bate de béisbol, le colocó una bolsa de plástico en la cabeza y lo observó luchar por respirar durante aproximadamente ocho minutos, antes de finalmente apuñalarlo con un cuchillo casero. Según los fiscales, Allen se sentó en una silla de jardín cercana mientras veía a su amigo morir lentamente.
Ambos hombres habían sido amigos desde la escuela secundaria y habían compartido una velada en un bar local antes de dirigirse a la casa de Allen la noche del 27 de septiembre, donde comenzó la espantosa agresión. Los sonidos de la brutal golpiza fueron capturados por una cámara de seguridad cercana, la cual registró cómo Allen golpeaba a Hahn durante aproximadamente 18 minutos. Las imágenes también mostraron a Allen arrastrando a Hahn, gravemente herido y semiconsciente, hacia su terraza trasera, donde lo dejó mientras continuaba torturándolo.
Poco después, Allen regresó con un bate de béisbol y continuó golpeando a su amigo en la cabeza y el cuerpo. Al percatarse de que Hahn seguía con vida, se retiró brevemente y volvió con una bolsa de plástico, que colocó en la cabeza de su amigo, asegurándola con un nudo flojo. Allen observó mientras Hahn luchaba por respirar antes de apuñalarlo repetidamente en el cuello, finalizando con un total de 10 puñaladas.
El horror no terminó ahí. Según los fiscales, después de la muerte de Hahn, Allen supuestamente llamó a su empleado de mantenimiento y le pidió que limpiara la casa. Al llegar, el trabajador vio “sangre por toda la casa” y el cuerpo de la víctima cubierto con una manta. Horrorizado, el empleado huyó de la escena y contactó a la policía, quienes acudieron de inmediato al lugar.
Las imágenes de las cámaras de seguridad también captaron a Allen rogándole a su amigo que muriera durante el ataque, aunque aún no está claro qué motivó esta brutal agresión. Allen deberá regresar a la corte el 14 de noviembre y, de ser encontrado culpable del cargo de asesinato, podría enfrentar una condena a cadena perpetua.
Este caso ha conmocionado a la comunidad local por la naturaleza violenta y prolongada del ataque, y ha recordado a muchos otro caso similar en Long Island. En 2019, el maestro Evan Grabelsky fue asesinado con cientos de puñaladas en la casa que compartía con sus padres en Merrick, Long Island. En 2021, su pareja, Ryan Lindquist, se declaró culpable del asesinato.
Si usted o alguien que conoce está siendo víctima de maltrato o abuso, existen recursos disponibles para buscar ayuda:
•Llame al 911 en caso de emergencia.
•Llame a la Línea de Prevención del Suicidio y Crisis al 988 o al (800)-942-6906.
•Envíe un mensaje de texto con la palabra “WELL” al 65173.
•Revise más información en https://nycwell.cityofnewyork.us/es/ y www.988lineadevida.org.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com.