El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador no reveló la identidad del sujeto, pero medios locales lo identificaron como José Alberto García, alias La Kena, jefe de un grupo que se separó del Cártel del Golfo. Está implicado en varios delitos violentos, incluido el secuestro de cuatro estadounidenses durante un viaje de turismo médico, dos de los cuales fueron asesinados.
Durante su conferencia de prensa matutina, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador anunció el jueves que las autoridades del país arrestaron al presunto líder de una banda responsable del secuestro de 32 migrantes en diciembre en Tamaulipas, estado fronterizo con Estados Unidos.
“¿Se acuerdan de que secuestraron a unos extranjeros? En Reynosa, que los encontramos a todos, porque se llevó a cabo una acción, porque así estamos. ¿Si se acuerdan de eso? Hace relativamente poco. Hoy se detuvo al presunto responsable de la banda que actuaba ahí”, comunicó.
El mandatario mexicano no precisó la identidad del detenido, sin embargo, medios locales vincularon el arresto con José Alberto García, conocido, entre otros seudónimos, como Kena o Kena 19. Según, el sujeto encabeza una facción llamada Los Ciclones, que se separó del Cartel del Golfo y está activa a lo largo de la frontera entre Tamaulipas y Estados Unidos, señaló la agencia de noticias Efe.
La Kena fue arrestado el jueves en Nuevo León y es considerado un objetivo prioritario y un instigador clave de la violencia en el noreste de México, según un comunicado de la portavoz de Seguridad de Tamaulipas.
Es, además, el líder del grupo criminal responsable del secuestro de cuatro estadounidenses, dos de los cuales fueron asesinados durante un viaje de turismo médico en la ciudad fronteriza de Matamoros en marzo de 2023.
El presidente mexicano López Obrador declaró que “no habrá impunidad”, y no dio más detalles.
La Kena sería el primer detenido de alto perfil por los hechos del 30 de diciembre, en el que individuos armados en cinco camionetas interceptaron un autobús con 37 pasajeros en Río Bravo, en la ruta hacia Matamoros, cerca de la frontera con Texas.
Los pasajeros secuestrados fueron seis migrantes hondureños y 26 venezolanos, incluidos tres con doble nacionalidad colombiana. Esta acción fue un complot para extorsionar a sus familias que viven en los Estados Unidos, indicaron las autoridades mexicanas.
El 3 de enero, el gobierno mexicano desató la polémica al afirmar haber “rescatado” a los extranjeros. Sin embargo, el presidente López Obrador modificó esta declaración al día siguiente, reconociendo que habían sido liberados por sus captores, sin haber arrestado a alguno de los implicados.
Este incidente se produjo tras un mes de diciembre sin precedentes, durante el cual más de 2,2 millones de migrantes intentaron entrar a Estados Unidos a través de la frontera con México de enero a noviembre, según confirmó la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.
Les otorgarán visado
Después de eso, el Instituto Nacional de Migración de México anunció ofrecerá visas humanitarias a los 32 migrantes. La emisión de estos documentos, indicó en ese momento, comenzará una vez que las víctimas sean reconocidas legalmente por el fiscal del estado de Tamaulipas.
El gobierno también buscó el apoyo de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para validar las acciones y asistencia brindada y llamó a la Agencia de Desarrollo Familiar de Tamaulipas a involucrarse, al notar la presencia de niños y familias entre las víctimas.
“Tras ser declaradas como víctimas de delito por la Fiscalía General de Justicia del Estado de Tamaulipas, el Instituto Nacional de Migración iniciará el proceso administrativo para entregarles dicha tarjeta que les permitirá acceder a diversos servicios públicos y garantizar su derecho humano a la identidad para integrarse a la vida social, económica y productiva del país”, indicó la institución.
Por Luis De Jesús