
«Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; no dejará para siempre caído al justo.»
Reflexión:
Este versículo nos invita a confiar en Dios y entregarle nuestras preocupaciones. A menudo, intentamos resolver nuestros problemas con nuestras propias fuerzas, pero Dios nos recuerda que podemos depositar nuestras cargas en Él. Él nos sostiene y fortalece en todo momento.
Dios no solo nos ayuda en tiempos difíciles, sino que promete que el justo no caerá definitivamente. Aunque enfrentemos desafíos, no seremos destruidos. Su amor y misericordia nos sostienen en los momentos más complicados.
Aplicación:
- Confía tus preocupaciones a Dios en lugar de llevarlas solo.
- Cree en su fidelidad, pues Él nunca abandona a quienes le buscan con sinceridad.
- Descansa en su promesa de sustento, sin importar la dificultad.
- Ora con fe, sabiendo que Dios tiene el control de cada situación.
Oración:
«Señor, hoy te entrego mis cargas. A veces me siento abrumado, pero sé que tú eres mi sustento y fortaleza. Ayúdame a confiar en ti y a descansar en tu amor. No permitas que el miedo o la ansiedad me alejen de tu paz. Gracias porque sé que nunca me abandonarás. Amén.»