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📖 «No se inquieten por el mañana, porque el mañana traerá sus propias inquietudes. Basta a cada día su propio mal.»
💡 Reflexión: En nuestra vida cotidiana, es común preocuparnos por el futuro: ¿Qué sucederá mañana? ¿Cómo resolveré mis problemas? ¿Tendré lo que necesito? No obstante, Jesús nos enseña una verdad esencial: vivamos el presente con confianza en Dios.
Con frecuencia, nos aferramos a la ansiedad del mañana y olvidamos que Dios ya tiene el control. Cada día trae sus propios retos, pero también sus bendiciones. Preocuparse en exceso no cambia el futuro, solo nos roba la paz del presente.
Dios no nos llama a la irresponsabilidad, sino a la confianza. Él nos proveerá lo necesario cuando llegue el momento. Si ponemos nuestra fe en Él, no habrá temor ni angustia que nos derrote.
🎯 Aplicación para nuestra vida: Hoy, decide soltar la ansiedad y confiar en que Dios proveerá lo que necesitas. Vive el presente con gratitud y fe, sabiendo que cada día trae su propio propósito y enseñanza.
🙏 Oración: Señor, ayúdame a confiar en Ti y a vivir el presente sin angustia por el mañana. Enséñame a depender de Tu provisión y a encontrar paz en Tu plan para mi vida. Amén.