Huawei y su Ascenso en el Mercado de GPUs para Inteligencia Artificial: ¿Podrá Superar las Limitaciones de Fabricación?
La industria de los chips para inteligencia artificial (IA) vive momentos de incertidumbre y transformación, particularmente en China. NVIDIA, líder indiscutible del mercado global de GPUs para IA, había logrado hasta hace poco dominar más del 90% del mercado chino. Sin embargo, las recientes sanciones impuestas por Estados Unidos han abierto una ventana de oportunidad para las empresas locales. En este contexto, Huawei emerge como una de las principales competidoras gracias a su familia de GPUs Ascend AI. Pero, ¿es suficiente su avance tecnológico para desplazar a NVIDIA en un mercado tan competitivo?
Huawei y sus GPU Ascend AI: Más de Cinco Años de Desarrollo
Huawei lleva trabajando más de cinco años en sus propias GPUs diseñadas para IA, bajo la línea Ascend AI. Estos chips han experimentado mejoras significativas desde su creación, con el objetivo de competir directamente con los modelos A100 y H100 de NVIDIA, considerados los más avanzados en el sector. Según analistas de la empresa iFly Tek, la potencia bruta de las GPUs Ascend es comparable a la de sus homólogas de NVIDIA. Sin embargo, aún están rezagadas en términos de rendimiento práctico en aplicaciones del mundo real, un aspecto crítico en la evaluación de chips para IA.
Uno de los desarrollos más prometedores de Huawei es el Ascend 910C, una versión mejorada del Ascend 910B. Huawei afirma que su rendimiento se acerca al del A100 de NVIDIA, lo que representa un avance importante para la industria china. Este nuevo chip ya ha comenzado a captar el interés de grandes empresas tecnológicas chinas, como ByteDance, que planea utilizarlo para entrenar un nuevo modelo de IA. ByteDance ha encargado más de 100,000 unidades del Ascend 910B, aunque hasta mediados de 2024 solo había recibido menos de 30,000.
El Papel de SMIC y los Desafíos de la Fabricación
A pesar del interés creciente en los chips de Huawei, su fabricación a gran escala enfrenta serios obstáculos. Los Ascend 910C son producidos por Semiconductor Manufacturing International Corporation (SMIC) utilizando su litografía N+2, una tecnología menos avanzada que la de competidores internacionales debido a las restricciones impuestas por las sanciones de Estados Unidos. Estas sanciones impiden que SMIC acceda a equipos de litografía de ultravioleta extremo (UVE) de la empresa neerlandesa ASML, forzando a la compañía a recurrir al multiple patterning, un proceso más costoso y menos eficiente.
El principal problema radica en el rendimiento por oblea del proceso N+2, que apenas alcanza el 20%, muy por debajo del mínimo del 70% requerido para una producción rentable. Aunque el rendimiento del proceso utilizado para el Ascend 910B es mejor, alrededor del 50%, sigue siendo insuficiente para garantizar una fabricación competitiva. Esto limita significativamente la capacidad de Huawei para satisfacer la creciente demanda de sus GPUs, especialmente en un momento en el que busca capitalizar el debilitamiento de NVIDIA en el mercado chino.
Impacto de las Sanciones y el Futuro de la Industria
Las sanciones lideradas por Estados Unidos han tenido un impacto directo no solo en Huawei, sino también en toda la industria de semiconductores china. Al no tener acceso a la tecnología de punta de ASML, las empresas chinas están en desventaja frente a sus competidores globales. Además, los altos costos asociados al uso del multiple patterning hacen que los chips producidos localmente sean más caros y difíciles de fabricar en grandes volúmenes.
A pesar de estos desafíos, Huawei se mantiene optimista y planea iniciar la fabricación masiva del Ascend 910C a principios de 2025. Sin embargo, muchos analistas consideran que SMIC tendrá dificultades para mejorar su rendimiento por oblea lo suficiente como para cumplir con las expectativas de Huawei.
¿Un Futuro Prometedor o un Reto Insuperable?
El camino de Huawei hacia el liderazgo en el mercado de GPUs para IA es complejo. Por un lado, cuenta con una tecnología cada vez más sofisticada y con el respaldo de una creciente demanda en China. Por otro lado, enfrenta restricciones tecnológicas y de fabricación que limitan su capacidad para competir en igualdad de condiciones con NVIDIA.
En este contexto, el futuro de Huawei dependerá en gran medida de su capacidad para superar los obstáculos actuales, ya sea desarrollando tecnologías alternativas a las de ASML o encontrando formas de optimizar sus procesos de fabricación. Lo que es seguro es que la competencia por dominar el mercado de GPUs para IA apenas comienza, y Huawei tiene el potencial para ser un actor clave en esta batalla.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com