Nueva York implementa contenedores oficiales para reducir ratas y basura en las calles
Nueva York – En un esfuerzo por reducir la proliferación de ratas y la acumulación de basura en las aceras, la Ciudad de Nueva York implementa desde el martes una nueva normativa que obliga a todos los edificios de entre una y nueve unidades residenciales a utilizar contenedores de basura de plástico con tapas seguras en lugar de dejar bolsas expuestas en la calle.
La medida, impulsada por el Departamento de Saneamiento de la ciudad, marca un cambio significativo en la gestión de residuos, ya que es la primera vez en medio siglo que la basura de los neoyorquinos no quedará en bolsas a la intemperie para su recogida. “Este sistema de bolsas es prácticamente un ‘bufé’ para las ratas durante toda la noche. Es momento de vivir como lo hace el resto del mundo”, comentó Jessica Tisch, comisionada de Saneamiento.
Los contenedores oficiales, disponibles en dos tamaños y diseñados específicamente para ser a prueba de roedores, se venden a los propietarios por un precio de 50 dólares cada uno. Hasta el lunes, más de 400,000 unidades habían sido adquiridas, señalando una respuesta positiva de los residentes que buscan colaborar con esta iniciativa para mejorar la limpieza urbana.
Reglas de implementación y período de adaptación
La normativa también abarca a edificios de apartamentos y viviendas unifamiliares. Para quienes aún no hayan comprado el contenedor oficial, la ciudad ha establecido un período de gracia hasta el 2 de enero. Durante ese tiempo, las autoridades emitirán advertencias a los infractores. A partir de esa fecha, las multas por incumplimiento oscilarán entre los 50 y los 200 dólares.
“Queremos dar tiempo suficiente para que todos se adapten, para que los contenedores reemplacen el hábito de dejar la basura en las aceras”, indicó Tisch. “Mi mensaje a los neoyorquinos es simple: es hora de devolver la dignidad y el orden a cada cuadra de nuestra ciudad”.
Esta normativa también se extiende a edificios de uso especial, incluidas agencias municipales, organizaciones sin fines de lucro, lugares de culto y oficinas en edificios residenciales. La administración del alcalde Eric Adams ha calificado esta iniciativa como parte de una “revolución de la basura”, que busca transformar la gestión de los 44 millones de libras de residuos diarios que genera la ciudad.
Planes a largo plazo y comparación con otras ciudades
La implementación en edificios más grandes comenzará en la primavera de 2025, cuando la ciudad desplegará camiones especializados que vaciarán los nuevos contenedores de basura directamente desde las aceras en las estructuras de gran tamaño. Este plan de expansión, que también apunta a reducir las lesiones laborales entre los trabajadores de saneamiento, se basa en modelos de gestión de residuos adoptados en ciudades europeas como Barcelona.
“Con esto, solo estamos poniéndonos al día con los estándares de otros municipios a nivel mundial”, destacó el alcalde Adams en relación a la normativa, la cual sigue a recientes cambios en las reglas de manejo de basura en áreas comerciales y negocios.
Desde marzo, los más de 200,000 establecimientos comerciales de Nueva York están obligados a mantener sus residuos en contenedores cerrados. En agosto de 2023, la ciudad impuso a restaurantes, tiendas de conveniencia y bares el uso de botes resistentes con tapas seguras, extendiendo el requerimiento a las cadenas comerciales en el mes siguiente. Con estas iniciativas, Nueva York busca seguir los pasos de ciudades globales en el manejo eficiente de residuos, protegiendo así la salubridad y la calidad de vida de sus residentes.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com