Escándalo de Falsificación de Certificados de Vacunación en Nueva York: Antiguos Pacientes Expulsados del Sistema Escolar
NUEVA YORK (AP) — En un incidente reciente que ha sacudido a la comunidad de Plainedge, en Long Island, el distrito escolar ha tomado la decisión de expulsar a los antiguos pacientes de una enfermera que se declaró culpable de llevar a cabo un plan para crear certificados falsos de vacunación contra el COVID-19. Esta medida llega casi tres años después de que Julie DeVuono, dueña del consultorio pediátrico Wild Child Pediatric Healthcare en Amityville, y un empleado fueran acusados de falsificar tarjetas de vacunación y obtener más de 1,5 millones de dólares de esta estafa.
La controversia se desató cuando DeVuono fue arrestada en enero de 2022, tras ser acusada de emitir tarjetas de vacunación fraudulentas por las que cobraba 220 dólares para adultos y 85 dólares para niños. En una revisión de su vivienda, las autoridades encontraron 900.000 dólares en efectivo, lo que subrayó la magnitud del fraude.
En septiembre de 2023, DeVuono se declaró culpable de lavado de dinero y falsificación, y en junio recibió una sentencia de 840 horas de servicio comunitario en su actual residencia en Pensilvania. Tras su condena, expresó su creencia de que los trabajadores de salud tienen el derecho a rechazar las vacunas, argumentando que “si esas personas temían más a la vacuna que a contraer COVID, cualquiera en nuestra sociedad tiene derecho a decidir por sí mismo”.
El escándalo ha continuado teniendo repercusiones. El mes pasado, las autoridades de salud del estado de Nueva York enviaron citaciones a más de 100 distritos escolares pidiendo los registros de vacunación de unos 750 niños que habían sido atendidos por DeVuono y en Wild Child Pediatrics. Según un informe de Newsday, más de 50 padres de antiguos pacientes han manifestado su oposición a las acciones del estado y de los distritos escolares que buscan obtener los historiales de vacunación de sus hijos o expulsarlos.
En el distrito escolar de Plainedge, al menos otros dos antiguos pacientes de Wild Child han sido excluidos de las aulas y ahora reciben educación en casa, según declaró el superintendente Edward A. Salina Jr. DeVuono ejecutó su esquema en un momento en que Nueva York implementaba algunas de las regulaciones de vacunación contra el COVID-19 más estrictas de Estados Unidos, afectando a empleados públicos y a clientes de restaurantes y otros negocios en la ciudad.
El aumento del escepticismo hacia las vacunas ha llevado a una disminución en las tasas de vacunación infantil contra enfermedades como el sarampión y la poliomielitis, un fenómeno que ha generado preocupación en el ámbito de la salud pública en los años posteriores a la crisis del COVID-19.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com