Un menor fue acusado de haberle disparado en la cabeza a un padre latino que estaba sentado en un parque en NYC. La familia cree que fue alcanzado «por error».
Un adolescente de 17 años fue detenido y acusado como sospechoso de haber disparado desde una patineta scooter, matando “por error” a Miguel Cruz, un padre trabajador de 47 años que estaba sentado en un parque en El Bronx (NYC).
Cruz, padre de unas gemelas, fue baleado en la cabeza al final de la tarde del 2 de agosto a la altura de 1600 Sedgwick Av. Lo trasladaron al St. Barnabas Hospital, donde fue declarado muerto. El sospechoso, que no ha sido identificado por ser menor de edad, fue capturado casi un mes después, el martes 27, y acusado de homicidio involuntario.
La jueza Gayle Roberts puso en prisión preventiva al sospechoso, señalando “la naturaleza de los cargos” y las “acusaciones de que él es el pistolero”. El adolescente bajó la cabeza y comenzó a llorar después de la lectura de cargos y debe regresar a la corte mañana 30 de agosto, indicó Daily News.
Cruz acababa de recoger a su madre enferma y a su sobrina de 4 años, a quienes había dejado en casa de la señora. Luego se sentó de espaldas a la calle en un banco en un parque infantil en Sedgwick Ave. cerca de Bridge Park cuando el pistolero abrió fuego mientras pasaba en una scooter.
Se cree que Cruz fue víctima de una bala perdida. “Ni siquiera lo vio venir”, dijo su desconsolada hermana Camillia Andrade (32) al Daily News a principios de este mes. “Todavía estoy tratando de descubrir por qué. Mi hermano no discutía con nadie… Él era literalmente un espectador inocente. Podría apostar mi último dólar. Podría apostar mi vida a ello. (La bala) Nunca fue para él. No podría haber sido así”.
La policía no ha confirmado si el adolescente tenía la intención de dispararle a Cruz, quien no tenía antecedentes penales aparentes, dijo un portavoz de la policía de Nueva York.
La violencia armada es contante en Nueva York y algunas víctimas son alcanzadas al azar en calles, escuelas, el transporte público y negocios. Los enfrentamientos suelen estar vinculados con una batalla entre pandilleros por el territorio y los sospechosos a menudo se incriminan al alardear y publicar sobre sus crímenes en las redes sociales.
A principios de este mes un joven de 20 años fue arrestado como sospechoso del tiroteo mortal del niño Troy Gill (13) cuando regresaba a casa después de un partido de los Brooklyn Nets en Barclays Center, en una aparente venganza entre pandilleros.
También este mes Anthony Santiesteban (32) fue sentenciado a entre 40 años y cadena perpetua por matar a tiros a una madre en un estacionamiento en Long Island (NY). A fines de julio un joven inmigrante trabajador de la cadena de pizzas Papa John’s murió baleado en la cabeza afuera de su casa en El Bronx mientras planeaba viajar pronto de vacaciones a República Dominicana con su esposa.
Por El Diario