SpaceX ya no vende en Estados Unidos la antena con orientación automática, la ha reemplazado por la nueva.
La antena V4 es más barata de fabricar y ofrece mejores velocidades, con el hándicap de la orientación manual.
Starlink ha completado en Estados Unidos un nuevo cambio de generación. No de sus satélites, sino del kit de antena y router que hay que instalar en casa para obtener señal. La compañía acaba de retirar la antena estándar con motor de orientación automático y ahora vende a todos los clientes de Estados Unidos la nueva antena V4 con un diseño aparentemente inspirado en el Tesla Cybertruck.
Más allá del nuevo aspecto, el hardware V4 cuenta dos grandes mejoras para el usuario: mayores velocidades de subida y descarga, y un nuevo router con Wi-Fi 6. Sin embargo, carece de motores para orientarse hacia los satélites y requiere que el usuario la coloque en el ángulo correcto asistido por una app.
En el vídeo de instrucciones para instalar la antena se puede ver cómo la aplicación de Starlink indica al usuario cómo mover la antena para que el ángulo de orientación sea óptimo. El vídeo también recomienda dejar la antena en un lugar fijo, por ejemplo el tejado, para mantener un ángulo constante.
La nueva antena tiene un campo de visión de 110 grados, pesa alrededor de 3 kg y tiene una clasificación IP67 de Tipo 4 para resistir a la lluvia y vientos de más de 100 kilómetros por hora. Según su hoja de especificaciones, consume de 75 a 100 W, bastante más que los 50-75 del modelo ahora retirado de segunda generación.
En lugar de parabólica, la antena es completamente plana y puede inclinarse con su pie de apoyo o comprando un soporte opcional. Este diseño tiene una ventaja clave para SpaceX: es más fácil y barato de fabricar que el anterior. El problema es que ese ahorro de costes no se ha trasladado al usuario, que en Estados Unidos tiene que pagar 600 dólares por el kit.
El kit V4 se presentó hace tres meses sin bombo ni platillo, y hasta ahora solo estaba disponible para empresas y clientes de la tarifa itinerante. Ahora ha reemplazado a la antena estándar con orientación automática y es la opción por defecto para los clientes de la tarifa estándar residencial en Estados Unidos, lo que ocurrirá en el resto del mundo con el tiempo, según PCMag.
La nueva antena todavía no está disponible en España, donde SpaceX sigue enfocada en promocionar el servicio con publicidad y abaratando el precio de acceso. La tarifa residencial de Starlink ahora cuesta 59 euros al mes sin coste de activación y con el equipo incluido en régimen de alquiler.
Matías S. Zavia