La Administración Municipal presentó nuevo plan piloto, que comenzará en Harlem, y que busca que los edificios residenciales no almacenen basura en bolsas negras y canecas sino en grandes contenedores a los que las ratas no pueden acceder.
Una de las banderas de la Administración Municipal ha sido declararle la lucha a las basuras y las ratas que pululan en la Gran Manzana. Y de cara a que esa batalla tenga nuevos recursos y mejores herramientas, el alcalde, Eric Adams, presentó un plan piloto, que comenzará a implementarse en Harlem, que cuenta con un nuevo camión recolector que permitirá colocar contenedores a las afueras de edificios residenciales grandes, que agarrá de manera mecánica con los desechos.
Así lo anunció el mandatario local, durante una conferencia de prensa en la que mostró las bondades del nuevo camión y del programa, del que dijo ayudará a sacar toda la basura de la ciudad de Nueva York de las calles y la colocará en contenedores seguros y resistentes a los roedores. La meta final es hacer de Nueva York la ciudad más limpia de los Estados Unidos, y la Junta Comunitaria 9 de Manhattan será el primer distrito con el 100 por ciento de su basura en contenedores y con servicio de recolección para el próximo año.
“Los datos son claros: bajo nuestra administración, las calles de la ciudad de Nueva York están más limpias. Y a partir de este otoño, gracias a las medidas audaces que hemos tomado, un 70 por ciento de las bolsas negras de la ciudad de Nueva York saldrán de nuestras calles y se colocarán en contenedores, pero no nos detendremos ahí”, dijo el burgomaestre. “El nuevo camión de basura que presentamos cuatro años antes de lo previsto, representa el futuro de la recolección de basura de la ciudad de Nueva York. Y significa que podremos poner en contenedores (no simplemente en canecas) la basura de nuestros grandes edificios residenciales, algo que la gente no creía que fuera posible en nuestra densa ciudad”.
El concejal Shaun Abreu, presidente del Comité de Saneamiento del Concejo Municipal y uno de los principales líderes políticos de origen latino del órgano legislativo, aseguró que el programa piloto beneficiará a todos los neoyorquinos, quienes constantemente tienen que lidiar con roedores y basuras.
“Todos los neoyorquinos tienen una historia de ratas. Desde tiempos inmemoriales, estos roedores han excavado en las paredes de nuestros apartamentos, arruinado los paseos nocturnos y encontrado refugio en nuestro sistema de alcantarillado. Pero donde realmente prosperan es donde hay abundancia de basura, y en Nueva York, donde tiramos bolsas de basura de plástico en las esquinas, esto pasa prácticamente en todas partes”, dijo el legislador de Manhattan.
“La única manera de ganar la guerra contra las ratas es modernizar la forma en que eliminamos, contenemos y procesamos nuestros desechos, y eso es exactamente lo que estamos haciendo hoy en West Harlem, donde los residentes han experimentado las peores plagas de ratas en toda la ciudad durante décadas”, agregó Abreu, quien agradeció que su vecindario se ponga en la mesa de decisiones. “No sólo estamos cerrando la tapa a nuestra basura, sino que también estamos cerrando la puerta a un período de negligencia. El movimiento por calles limpias está aquí, y no podría estar más orgulloso de que West Harlem y Morningside Heights estén liderando desde el frente”.
La vicealcaldesa de Operaciones, Meera Joshi, recalcó que el fin de las bolsas negras de basura que ruedan por las calles de la Gran Manzana y que cada semana son vistas en aceras, está cerca, lo que de paso obliga a que los roedores no tengan manera de alimentarse.
“Las ratas y las bolsas negras están saliendo de nuestras calles; no hay lugar para ellas en una ciudad de Nueva York en los contenedores”, dijo la funcionaria, agregando que tanto los neoyorquinos como los turistas ya empiezan a notar la diferencia.
“Los neoyorquinos han sido claros: están hartos de las bolsas negras que ocupan nuestras aceras, y de los lixiviados de la basura y que les digan que otras ciudades del mundo pueden tener algo que nosotros no podemos”, dijo la funcionaria. “Esta administración rechaza el cinismo que dice que las cosas no pueden cambiar, y no se puede subestimar la velocidad a la que nos hemos movido para cambiar la relación entre 8,3 millones de neoyorquinos y 44 millones de libras diarias de basura”.
Dato
44 millones de libras de basura diaria se mueve en NYC.
Por Edwin Martínez