Militares ucranianos aseguran que su país se encuentra en una situación «peligrosa».
Las perspectivas militares de Ucrania son «sombrías».
Tras una contraofensiva que termina sin haber alcanzado ninguno de sus objetivos, la ayuda militar occidental ya no está garantizada al mismo nivel que antes, afirma The New York Times citando a varios militares ucranianos.
En un extenso artículo publicado este sábado, el periódico estadounidense recoge varios testimonios de soldados ucranianos en el frente.
Estos aseguran que su país se encuentra en una situación «peligrosa», donde las tropas están cansadas, escasas de municiones y superadas en número.
Incluso el uso de municiones de racimo suministradas por Estados Unidos, controvertida porque daña a los civiles tiempo después del fin de las hostilidades, ha perdido parte de su potencia en el campo de batalla, señala el medio.
Según un comandante de pelotón ucraniano no identificado, las municiones de racimo se utilizaban para «golpear a grandes grupos» de tropas rusas, pero ahora los ataques afectan a «unidades mucho más pequeñas».
Asimismo, las profundas trincheras excavadas por las tropas rusas también complican los ataques contra ellas.
A pesar de que Kiev no tiene la munición o la gente para defender el territorio que actualmente posee, desde Washington insisten en pasar a una estrategia defensiva en 2024.
«Nuestros chicos están siendo duramente machacados», dijo un soldado ucraniano. «Ahora es peligroso por todas partes», agregó.
La Casa Blanca aseguró este jueves que EE.UU. suspende el suministro de armas y material militar a Ucrania por falta de presupuesto.
«Hemos emitido el último paquete que hemos retirado y para el que disponíamos de financiación», declaró el coordinador de comunicaciones estratégicas del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, en una reunión informativa.
«La ayuda que prestábamos se ha paralizado», añadió.