150 miembros de esta brigada militar se incorporan a la logística de la crisis migratoria. La Ciudad reitera que la asignación del TPS a los venezolanos, no es en sí misma, un camino para descongestionar los refugios.
El Estado de Nueva York desplegó este lunes a 150 miembros adicionales de la Guardia Nacional para apoyar la respuesta a la crisis migratoria. Esta acción junto con una inversión de $50 millones, ayudará a acelerar los trámites para quienes apliquen para permisos de trabajo y solicitudes formales de asilo político.
El objetivo del gobierno estatal es claro: Poner el acelerador para que los recién llegados, obtengan un estatus laboral legal y “salgan de los refugios financiados por los contribuyentes”, como precisó textualmente un comunicado oficial.
“Necesitamos asegurarnos de que las personas puedan realizar los trámites necesarios para establecerse aquí, poder trabajar y comenzar a hacer realidad su sueño americano. Los miembros de nuestra Guardia Nacional desempeñan un papel muy importante al ayudar en el proceso. Estamos agradecidos por su servicio”, reiteró la gobernadora Kathy Hochul.
Esta estrategia se suma a los 1,900 efectivos que actualmente brindan apoyo logístico y operativo a los inmigrantes en todo el estado.
El personal de la Guardia Nacional de Nueva York actualmente trabaja en 51 hoteles y dos Centros de Ayuda y Respuesta a Emergencias Humanitarias de la ciudad de Nueva York.
En asociación con funcionarios federales y municipales, Nueva York se encuentra en este momento en un “Mes de Acción”, donde más de 50 miembros del personal del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), están trabajando para procesar las documentaciones de autorizaciones de trabajo derivadas de quienes han hecho la petición de asilo político o apliquen a este documento por otra razón.
En este sentido, la comisionada de la División de Seguridad Nacional y Servicios de Emergencia, Jackie Bray, dijo que “hay más por hacer para garantizar que los inmigrantes, puedan ser autosuficientes y avanzamos en todas las medidas disponibles para garantizar que eso suceda”, acotó.
No es tan sencillo
Apenas unos días después de que la Casa Blanca otorgara el Estatus de Protección Temporal (TPS) a los venezolanos que llegaron al país antes de julio de 2023, la fórmula de agilizar permisos de trabajo como una vía que permita empezar a descongestionar los refugios, empieza a tener sus primeros desafíos.
Portavoces del gobierno municipal de la Ciudad de Nueva York confirmaron a medios locales que las altas tarifas de solicitud de TPS y un engorroso proceso de solicitud de exención de tarifas, podría bloquear o retrasar la solicitud a los inmigrantes que aplican.
De acuerdo con la experiencia de los ‘tepeseanos’, en los últimos dos años, el proceso de espera de la aprobación es largo y las comisiones por aplicación por persona alcanza los $545. Eso significa que para una pareja poder avanzar en este paso, implica un desembolso de $1,090.
El vicealcalde Fabien Levy, confirmó a la NBC que el alcalde Eric Adams está pidiendo al gobierno federal que ponga en línea el proceso de exención de tarifas, para no retrasar el acceso para completar las solicitudes, además de otras formas para poner el pie en el acelerador a este proceso.
Aunque Adams valoró el otorgamiento del TPS a los venezolanos, señaló que sólo alrededor de 15,000 migrantes podrán solicitar el TPS, dejando a muchos más que aún necesitan ayuda para obtener permisos de trabajo.
“Queremos ser claros: Esto no va a ayudar a todos los inmigrantes que encuentran en esta ciudad. Tenemos alrededor de 60,000 bajo nuestro cuidado, 10,000 llegan por mes. Y muchos de esos recién llegados no podrán solicitar el TPS, ni los demás beneficios de esta iniciativa”, argumentó.
Por su parte, el Caucus de ‘Sentido Común’ de la minoría republicana en el Concejo Municipal, redobló este lunes su postura de que los vientos de “permisos de trabajo acelerado”, solo pondrán más presión a la “tragedia migratoria”, que enfrenta la Gran Manzana.